Bióloga Karen Fuentes
Nuestro Planeta es un Mundo de Agua y todos sabemos que el agua es esencial para la vida, lo que pocos saben es que muchos científicos están hablando de la Oceanósfera y del Océano Vivo que interactúa con la tierra y de cuyos ciclos y corrientes depende la existencia de todas las criaturas, incluidos los humanos.
Las cálidas aguas del golfo de México y del mar Caribe albergan uno de los ecosistemas más fascinantes y con mayor diversidad biológica de la Tierra; además de especies únicas como el manatí o vaca marina, delfines moteados y tiburones ballena, tortugas marinas, diversas variedades de peces y mantarrayas. En México existen seis especies de mantarrayas y rayas diablo que van desde pequeñas (1 metro) hasta gigantes (7 metros). Ubicada en la región norte de la Península de Yucatán, dentro de la Reserva de la Biósfera del Caribe Mexicano, se encuentra el área de transición entre el Golfo de México y el Caribe Mexicano donde cada año (de mayo a septiembre) las corrientes marinas elevan aguas ricas en nutrientes y plancton que atraen a varias especies filtradoras, entre las que se encuentran las mantarrayas (Mobula. cf. birostris), Rayas Diablo Pigmeas del Atlántico occidental (Mobula hypostoma) y una de las mayores congregaciones conocidas de tiburones ballena (Rhincodon typus) en el mundo.
Las mantarrayas son criaturas con gran inteligencia y curiosidad, además de ser capaces de ofrecer un espectáculo maravilloso al nadar de manera sincronizada y saltar, elevándose sobre las aguas y “volando” por unos segundos para reincorporarse al agua: cualquiera que haya tenido la experiencia de verlas, jamás olvidará la sincronía, el ritmo y la belleza de sus movimientos.
Sin embargo, a pesar de su popularidad entre los buzos y quienes practican el esnórquel, muchos aspectos de la vida de estas criaturas siguen siendo un misterio, y solo se conocen fragmentos de su historia de vida. La importancia de la existencia de Áreas Naturales Protegidas permite estudiar y conocer cómo es que las mantas y las rayas diablo utilizan estos sitios para alimentarse y descubrir su papel en el equilibrio ecológico a través de su alimentación y reproducción.
Recordemos que cada especie en la naturaleza interactúa con las demás y realiza una función de la que depende su propia salud y la biodiversidad de nuestras costas. Las principales amenazas que enfrentan las mantas y las rayas diablo son la sobrepesca, la pesca incidental (bycatch), el cambio climático y la contaminación marina.
Es responsabilidad de todos informarnos y conocer el ecosistema en cual vivimos y compartimos con otras especies, con el fin de cuidarlo y de que las futuras generaciones puedan conocer la riqueza natural de México y del mundo. Es cierto que existen leyes que actualmente prohíben la pesca y el desembarque de mantarrayas y rayas diablo en los mares mexicanos, pues todas las especies de mobúlidos en México (M. birostris, M. hypostoma, M. munkiana, M. thurstoni, M. tarapacana, M. mobular), se encuentran en la en la categoría de Protección Especial (Pr) NOM-059-SEMARNAT-2010.
Sin embargo, no sólo es muy importante que la ley se conozca y se respete, sino que en las escuelas, corporaciones pesqueras y destinos turísticos se logre entender la importancia de investigar, educar y colaborar en el resguardo de los hábitats en donde las mantarrayas y todas las otras especies de la fauna y flora marina puedan mantener su equilibrio ecológico. Si conocemos y entendemos que las acciones de los seres humanos: nuestras ciudades , desarrollos turísticos y hábitos de pesca pueden determinar el futuro de las especies con las que compartimos el planeta, será mucho más fácil entender que, cuando una especie desaparece, muchas se ponen en peligro al romperse la cadena alimenticia y desequilibrar el sistema.
Para ello es necesario realizar investigaciones científicas que ofrezcan a los gobiernos y asociaciones ciudadanas ambientalistas la información científica que les permita comprender sus hábitos, relaciones y los riesgos que las actividades humanas implican para ellas, a fin de poder crear leyes que las protejan. También es necesario que los pobladores de zonas costeras y turistas conozcan la importancia y papel de las especies marinas, para que cada persona sea capaz de asumir la responsabilidad que le corresponda para cuidar los mares y a las criaturas que en él habitan.
Por ello invitamos a todos los amantes de la naturaleza, de la vida marina y, en particular de las extraordinarias mantarrayas, a que se acerquen a las asociaciones ecologistas e instituciones que realizan proyectos de conservación, investigación y educación ambiental de ecosistemas marinos y acuáticos para ser parte de quienes quieren conocer más y colaborar en una mayor conciencia sobre el mar y sus fantásticas criaturas. Puedes aprender más sobre las mantas gigantes y sus parientes las rayas diablo en los siguientes sitios web y redes sociales:
https://www.mantacaribbeanproject.org/ https://www.mantatrust.org/ www.oceanosvivientes.org