Macarena Huicochea
Los mexicanos tenemos fama de “reírnos de la muerte”; así como de que los hombres son “muy machos y las mujeres “muy hembras” … lo cual sin duda puede comprobar cualquier turista desprevenido que se tope con un amigo bromista que le haga probar su primer trago de tequila o mezcal “derecho” (es decir, sólo, sin dilución alguna); o morder uno de nuestros emblemáticos chiles habaneros, lo que sin duda pondrá en evidencia que algunos platillos y bebidas de nuestro país deberían contar con un letrero que diga: “solo para valientes”.
Y es que platillos y bebidas que a nosotros nos resultan comunes (como los chapulines, los gusanos de maguey o los huevos de hormigas chicatanas, por mencionar solo algunos) pueden convertirse en una “experiencia extrema” para quien no lo conoce o tiene integrado a su cultura gastronómica. Y si bien es cierto que existen otros países en donde es común el uso de diversas especias y chiles muy picantes o de bebidas exóticas a las que se les agregan serpientes, hormigas, escarabajos y otros bichos raros que pudieran parecer riesgosos para la salud y que pueden incluir la advertencia en su etiqueta de: “El consumo de este producto es responsabilidad de quien lo ingiere y quien lo recomienda”, existen algunas recetas que forman parte de la tradición culinaria ancestral o de modernas adecuaciones a antiguas fórmulas medicinales que consideraban los venenos y a los animales que los portaban como representación de fuerzas naturales o divinidades relacionadas con el inframundo y la muerte. Uno de estos casos es el de licores que contienen un alacrán o escorpión, bebidas que se ha puesto de moda como parte de la mixología de algunos bares de nuestro país y del Caribe y que han adquirido fama de ser afrodisiacos o de propiciar un mejor sistema inmunológico, lo que protege contra diversas enfermedades.
Pero, más allá de la voz popular o de las leyendas urbanas, los investigadores Diana Cahuich-Campos y Fabio Flores Granados, de la Universidad Nacional Autónoma de México publicaron un interesante estudio titulado: Entomoterapia: curaciones entre los antiguos pueblos mayas de la península de Yucatán, México en el cual afirman que:
Y añaden:
Y es que, sin duda alguna, los escorpiones o alacranes son animales que, a pesar o precisamente por su peligro, han sido venerados en muchas culturas. Se asegura que existen cerca de 2000 especies distribuidas en todo el planeta y que son criaturas que se han adaptado fácilmente a una gran variedad de ecosistemas: desde las dunas y desiertos, hasta los bosques y selvas, en donde han evolucionado como depredadores nocturnos de insectos y otros artrópodos e inclusive algunos roedores y lagartijas. Los hay tan pequeños como los que miden 3 cm y enormes de hasta 25 cm, y lo que los distingue de otros arácnidos por un par de pinzas y una larga cola con un afilado aguijón, portador del veneno.
Se asegura que al beber un “shot” de tequila o mezcal al que se ha añadido un alacrán produce una breve pero intensa experiencia que puede incluir el consumo de una parte o todo el acorazado e impactante animal ponzoñoso.
Es importante señalar que las antiguas formulas herbolarias que incluyen algún tipo de insecto venenoso requieren de un conocimiento de los procesos, por lo que no cualquier bebida puede resultar realmente medicinal.
De acuerdo con Cahuich-Campos:
Por ello, en Hola Tulum los invitamos a investigar y ser prudentes al elegir la marca de bebida y lugar de consumo para considerar los riesgos de vivir esta experiencia extrema ya que en algunos casos la secretaría de salud de algunos estados ha hecho un llamado a la población acerca de los riesgos de consumir el mezcal o tequila con alacrán, debido a los efectos adversos que pueden tener personas sensibles, que pueden reaccionar con taquicardia o sentirse tan mal que terminan en el hospital.
* Diana Cahuich-Campos y Fabio Flores Granados, « Entomoterapia: curaciones entre los antiguos pueblos mayas de la península de Yucatán, México », ELOHI [En línea], 5-6 | 2014, Publicado el 01 enero 2015, consultado el 12 noviembre 2019. URL : http://journals.openedition.org/elohi/712 ; DOI : 10.4000/elohi.712
Foto de portada: impulsonegocios.com